Qué tal queridas lectoras. el día de hoy nuestra Gran Aventura nos lleva a platicar sobre un trastorno que pareciera ser más común de lo que podemos pensar.
Hablaremos sobre trastorno de la personalidad múltiple conocido también cómo identidad disociativa.
Los trastornos disociativos son trastornos mentales que implican experimentar una desconexión y falta de continuidad entre pensamientos, recuerdos, entorno, acciones e identidad. Las personas con trastornos disociativos escapan de la realidad de formas involuntarias y nocivas para la salud y causan problemas de funcionamiento en la vida cotidiana.
Los trastornos disociativos generalmente se desarrollan como una reacción a un trauma y ayudan a mantener a raya los recuerdos difíciles. Los síntomas, que van desde la amnesia hasta las identidades alternativas, dependen en parte del tipo de trastorno disociativo que tenga. Los momentos de estrés pueden empeorar temporalmente los síntomas, haciéndolos más obvios.
El tratamiento para los trastornos disociativos puede incluir psicoterapia (psicoterapia) y medicación. Aunque tratar los trastornos disociativos puede resultar difícil, muchas personas aprenden nuevas formas de afrontarlo y llevan una vida saludable y productiva.
Síntomas
Los signos y síntomas dependen del tipo de trastornos disociativos que tenga, pero pueden incluir:
- Pérdida de memoria (amnesia) de ciertos períodos de tiempo, eventos, personas e información personal
- Una sensación de estar desapegado de ti mismo y tus emociones.
- Una percepción de las personas y las cosas que te rodean como distorsionadas e irreales.
- Un sentido de identidad borroso
- Estrés significativo o problemas en sus relaciones, trabajo u otras áreas importantes de su vida.
- Incapacidad para afrontar bien el estrés emocional o profesional.
- Problemas de salud mental, como depresión, ansiedad y pensamientos y comportamientos suicidas.
Hay tres trastornos disociativos principales definidos en el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM-5), publicado por la Asociación Estadounidense de Psiquiatría:
Amnesia disociativa. El síntoma principal es la pérdida de memoria que es más grave que el olvido normal y que no puede explicarse por una afección médica. No puede recordar información sobre usted mismo o sobre eventos y personas en su vida, especialmente de un momento traumático.
La amnesia disociativa puede ser específica de eventos en un momento determinado, como un combate intenso o, más raramente, puede implicar una pérdida total de la memoria sobre uno mismo. A veces puede implicar viajes o alejarse de su vida de forma confusa (fuga disociativa). Un episodio de amnesia suele ocurrir de forma repentina y puede durar minutos, horas o, en raras ocasiones, meses o años.
Trastorno de identidad disociativo. Anteriormente conocido como trastorno de personalidad múltiple, este trastorno se caracteriza por “cambiar” a identidades alternativas. Puede sentir la presencia de dos o más personas hablando o viviendo dentro de su cabeza, y puede sentirse poseído por otras identidades.
Cada identidad puede tener un nombre, una historia personal y unas características únicas, incluidas diferencias obvias en la voz, el género, los gestos e incluso cualidades físicas como la necesidad de anteojos. También hay diferencias en el grado de familiaridad de cada identidad con las demás. Las personas con trastorno de identidad disociativo también suelen tener amnesia disociativa y, a menudo, tienen una fuga disociativa.
Trastorno de despersonalización-desrealización. Esto implica una sensación continua o episódica de desapego o estar fuera de ti mismo: observar tus acciones, sentimientos, pensamientos y tu yo desde la distancia como si estuvieras viendo una película (despersonalización).
Otras personas y cosas a su alrededor pueden sentirse distantes y confusas o como un sueño, el tiempo puede ralentizarse o acelerarse, y el mundo puede parecer irreal (desrealización). Puede experimentar despersonalización, desrealización o ambas. Los síntomas, que pueden ser profundamente angustiantes, pueden durar solo unos momentos o aparecer y desaparecer durante muchos años.
Cuando ver a un doctor
Algunas personas con trastornos disociativos se presentan en una crisis con flashbacks traumáticos que son abrumadores o están asociados con un comportamiento inseguro. Las personas con estos síntomas deben acudir a una sala de emergencias.
Si usted o un ser querido tiene síntomas menos urgentes que pueden indicar un trastorno disociativo, llame a su médico.
Pensamientos o comportamiento suicida
Si tiene pensamientos de hacerse daño a sí mismo oa otra persona, llame al 911 o al número de emergencia local de inmediato.
Causas
Los trastornos disociativos suelen desarrollarse como una forma de afrontar el trauma. Los trastornos se forman con mayor frecuencia en niños sometidos a abuso físico, sexual o emocional a largo plazo o, con menos frecuencia, en un entorno familiar que es aterrador o altamente impredecible. El estrés de la guerra o los desastres naturales también puede provocar trastornos disociativos.
La identidad personal todavía se está formando durante la infancia. Entonces, un niño es más capaz que un adulto de salir de sí mismo y observar el trauma como si le estuviera sucediendo a una persona diferente. Un niño que aprende a disociarse para soportar una experiencia traumática puede utilizar este mecanismo de afrontamiento en respuesta a situaciones estresantes a lo largo de la vida.
Factores de riesgo
Las personas que experimentan abuso físico, sexual o emocional a largo plazo durante la infancia tienen un mayor riesgo de desarrollar trastornos disociativos.
Los niños y adultos que experimentan otros eventos traumáticos, como guerras, desastres naturales, secuestros, torturas o procedimientos médicos prolongados, traumáticos y de la vida temprana, también pueden desarrollar estas afecciones.
Complicaciones
Las personas con trastornos disociativos tienen un mayor riesgo de complicaciones y trastornos asociados, como:
- Autolesión o mutilación
- Pensamientos y comportamiento suicidas
- Disfunción sexual
- Trastornos por alcoholismo y uso de drogas
- Trastornos de depresión y ansiedad.
- Trastorno de estrés postraumático
- Desorden de personalidad
- Trastornos del sueño, que incluyen pesadillas, insomnio y sonambulismo.
- Trastornos de la alimentación
- Síntomas físicos como aturdimiento o convulsiones no epilépticas
- Grandes dificultades en las relaciones personales y laborales
Prevención
Los niños que son abusados física, emocional o sexualmente tienen un mayor riesgo de desarrollar trastornos de salud mental, como trastornos disociativos. Si el estrés u otros problemas personales están afectando la forma en que trata a su hijo, busque ayuda.
Concluyendo
Se caracteriza por patrones de percepción, reacción y relación que son relativamente fijos, inflexibles y socialmente desadaptados, es decir las personas que padecen este trastorno tienen una alteración en su entorno y en sus relaciones, incluyendo una variedad de personalidades o identidades, de ahí su nombre clínico: identidad disociativa.
Cada uno con su propio y particular patrón de percepción del entorno, por esto es frecuente o común que el diagnóstico pueda ser confundido con esquizofrenia.
Estas personalidades toman el control del comportamiento del individuo de tal manera que de forma rutinaria lo que se hace se va ejecutando y se asocia a cierto grado de pérdida de memoria.
Existen varios factores que pueden ser interactuantes, cómo el estrés insoportable, inmanejable, es decir, poca capacidad del manejo de la ansiedad y del estrés o bien puede ser otro factor relevante la experiencia traumática de un abuso físico con violencia o agresión o al igual un abuso psicológico envuelto en estos mismos contextos de violencia y agresión que pudieron haber sucedido en la niñez.
En la mayoría de los casos es muy recomendable que a estos pacientes se les atienda de manera meticulosa y articulada, entre el especialista psiquiátrico, el especialista psicoterapéutico, así como el apoyo familiar.
Recuerda que una de las mejores inversiones siempre será en tu salud mental.
Síguenos en Instagram, Facebook, Twitter.
¡Qué sería del mundo sin #ellas!