POR: LILI ABAID. PSICÓLOGA.
NOTA:
Estimado amigo, seguimos en el mes de papá, continuamos viendo la paternidad.
LOS HOMBRES COBRAN IMPORTANCIA:
El hombre convertido en padre, siente gran importancia de sí mismo. Siente una emoción, gusto y ganas de estar con el bebé, sienten una profunda preocupación si se siente mal o algo le pasa, si se enferma, normalmente se enojan cuando alguien les hace algo que ellos consideran dañino, les angustia tener que imponerles disciplina y sienten una gran satisfacción para hacer cosas y para luchar por ellos. Para trabajar y realizar nuevos proyectos.
Otros hombres dicen sentir un cambio espiritual, un acercamiento a Dios que los ayuda en la crianza. La mayoría de los hombres dice que con la llegada del bebé tienen menos tiempo para ellos, porque aprenden a ceder tiempo ya que su vida cambia. Se acabaron las salidas con la esposa a visitar amigos, cenar, al cine, tener vida social.
Con el bebé todas las cosas son diferentes, porque el niño se convierte en el centro de atención que reemplaza la familia. Incluso la perspectiva con respecto al trabajo también cambia porque ahora, hay que trabajar para el hijo, trabajar con más ganas e ímpetu, más sueldo para comprar las cosas del bebé.
Aprender a hacer más cosas para obtener un mejor trabajo, me permito recomendarte estudiar en Línea una especialidad así aumentas tú economía.
CON EL BEBÉ NUEVO LOS PADRES SE ATREVEN PORQUE NO TIENEN OTRA OPCIÓN:
Es divertido amigo, los hombres recién convertidos en padres se atreven a hacer cosas que antes no hacían. Cosas que les permitan solucionar problemas económicos, como por ejemplo hacer piñatas para vender, éstas no pasan de moda hasta cambiar de país.
No sé de dónde la sacan pero tienen una nueva energía e ímpetu para aprender, mejorar y realizar su vida cotidiana. Desean que la vida de sus hijos o hijas sea mejor que la que ellos tuvieron con respecto a comodidades, disciplina sin golpes, autoridad y sufrimiento. Buscan a la vez que sus hijos tengan una mejor relación con ellos, los padres y los hijos.
En este sentido los hombres también cambian en cuanto a comportamiento, formas de peinarse, vestir. Esto sucede porque los hombres-padres, se van transformando en ejemplo y los niños comienzan a imitarlos en lo que dicen y hacen.
DURANTE LA CRIANZA DE LOS HIJOS:
Durante la crianza de los hijos, los padres también aprenden. Al imitar a los padres los niños van educando a los padres en tolerancia para que así, vayan cediendo en su forma de ser y de ver la vida. Amigo es innegable que los hijos son los mejores maestros, fíjate que se me está ocurriendo en este momento que el 30 de Abril en vez de ser el día del niño común y corriente, debería ser el DÍA DEL NIÑO MAESTRO, analízalo te reirás tal vez pero es verdad.
Conforme el niño o niña va creciendo y va cuestionando lo que el padre hace o dice el niño va formando sus propias ideas y sus actividades. Cuestionarse lo que el padre hace o dice, les permite a los niños auto cuestionarse e innovar para crear nuevas formas de relación. La paternidad es un proceso de relación, en el que se va fomentando la identidad.
De acuerdo con Figueroa (1996) “La identidad de los participantes se va construyendo y reconstruyendo donde se aprende de forma bilateral replanteando continuamente nuevas maneras de ver y vivir la realidad”. En otras palabras la paternidad, involucra un conjunto de relaciones posibles en diversas áreas o aspectos, como:
- Relaciones de amor.
- Relaciones de conducción.
- Relaciones de cuidado.
- Relaciones de educación.
- Relaciones de juego.
- Relación de autoridad.
- Relación de aprendizaje recíproco.
- Relaciones de dirección.
- Relaciones de diversión.
La paternidad es una formación de identidades, de competencias sociales, valores y creencias. Una paternidad eficaz sería esa en la que se combinara de forma armónica todas estas áreas en la crianza. Ahora amigo te cuestiono:
¿Los hombres mexicanos ejercen una verdadera paternidad? Profesionalmente considero que no.
LOS PADRES NO QUIEREN QUE SUS HIJOS CREZCAN POR MIEDO A PERDER AUTORIDAD Y CONTROL SOBRE ELLOS:
En el caso de los hombres, éstos se enfrentan al cambio que se suscita cuando los hijos e hijas crecen y comienzan a tomar sus propias decisiones. Ahora ya no son ellos los modelos a seguir sino lo contrario. Las hijas y los hijos buscan exactamente lo opuesto a lo que los padres dijeran, hicieran o pensaran.
Lo anterior, los desconcierta, pero después les cae el 20, sus hijos e hijas son personas diferentes a ellos. Con gustos, pensamientos y sentimientos diferentes. Sin embargo este “veinte”, no les cae a todos los padres.
Después de que asumen que, los hijos e hijas son personas diferentes, los padres se deben centrar en pensar que, algún día tendrán que irse de su lado y que son ellos los que tienen que equiparar para ser autónomos y se puedan ir. Pensar en los consejos que tendrán que darles, pensar en lo que sería importante para que sus hijos e hijas puedan tener una vida independiente y exitosa.
FAMILIA Y PATERNIDAD:
NOTA:
Estimado amigo, he de decirte que familia y paternidad no son lo mismo.
El hecho de convertirse en padre constituye una experiencia que la mayoría de las personas afrontan en algún momento de su vida. Pero no, por ser habitual es intrascendente; existen experiencias a lo largo de la vida que sean tan significativas e importantes para un individuo como el nacimiento de un bebé.
En este sentido la situación, incorpora cambios importantes en la familia. La familia es considerada como un sistema social integrado por diversas personas. En dicho sistema, cada una de estas personas juega un rol y respeta relaciones interdependientes. Cualquier modificación en este sistema impacta tanto en el individuo y al sistema en general.
Los esposos y la familia como sistema relacional tienen que afrontar la incorporación de un nuevo miembro, que triplica las relaciones didácticas (madre-hijo o padre-hija) que existían anteriormente. Los procesos de cambio y adaptación, las nuevas exigencias y la redistribución de papeles y tareas que requieren la llegada de un bebé son de una magnitud potencialmente considerable para el sistema familiar.
Cuando los padres aceptan a sus hijos, los enseñan:
- Valorarse.
- Ser independientes.
- Afrontar los problemas que surjan en la niñez y la adolescencia.
- Explotar su potencial genéticamente heredado o adquirido por medio del aprendizaje.
Hay ciertos casos en los que, el tener un hijo provoca un grado extremo de sobre protección les vienen a la cabeza pensamientos que les generan creencias como:
- Al niño pueden ocurrirle cualquier tipo de situaciones. Por lo que no le permiten realizar muchas actividades. La pregunta a responder amigo: ¿No permitirles realizar muchas actividades a la larga trae consecuencias graves? Esto amigo, a la larga provocará que el niño sea un individuo miedoso, dependiente, vulnerable. Lo cual, hará que se ponga en desventaja con otros niños que hayan tenido un desarrollo y crianza totalmente opuestos.
- Por el contrario, aquellos padres que no tienen conflictos emocionales aceptan la idea de que por ser el primer hijo, tiene que ciertos temores. Ya que el terreno les es desconocido, pero saben que a la larga adquirirán experiencia. Esto les permite sentirse más tranquilos ahora, en el presente.
- En ambos casos, cuando llega más hijos los hombres, están preparados para prever y resolver cualquier situación de manera madura, segura y eficaz.
El resultado final de todo lo expuesto:
Los hombres se encuentran cada vez más involucrados. Situación que profesionalmente hablando me permito decirte que sí y que no. Esta será parte de otro artículo para este mes.
Me despido. ¡Es un Verdadero Placer! Enseñarte a través de los artículos. ¡La Educación es la mejor herramienta para enfrentar la Vida!
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¡Qué sería del mundo sin #ellas!
