Aceites Naturales. Amarás lo que hacen por ti.
Por: Cris Villegas
En la actualidad existen miles de productos para la piel, pero muchos tienen como base los aceites naturales que en realidad se utilizan desde hace miles de años con fines medicinales y embellecedores
Pero ¿qué propiedades tiene cada uno y para qué problemas es más recomendable usar uno u otro? Pues aquí en Ellas & Style nos dimos a la tarea de investigar algunos de los más utilizados y fáciles de conseguir, además de tener un costo muy accesible.
Aceite de argán
Extraído del fruto del árbol de Argán, tiene muchos usos, ya sea para cuidados del cabello y corporales. Las propiedades de este aceite en el cutis lo hacen perfecto tanto para pieles secas como grasas. En su composición abundan los tocoferoles, antioxidantes que retrasan el envejecimiento previniendo las arrugas. También es adecuado para calmar erupciones cutáneas, disminuir las estrías y quemaduras solares. Un consejo importante es que hay que asegurarse de que este aceite sea
Aceite de almendras:
Este aceite tiene propiedades emolientes que ayuda a suavizar e hidratar la piel, además de calmar irritaciones tópicas como la psoriasis y la dermatitis. Gracias a la vitamina E que contiene, puede ayudar a prevenir arrugas y estrías sobre todo mezclado con otros aceites como el de mosqueta. Este aceite, sin embargo, se utiliza sobre todo para realizar masajes. Gracias a la suavidad de su textura es sencillo de deslizar sobre la piel y aliviar la tensión muscular, calmando la ansiedad y el estrés. Sus propiedades nutritivas lo hacen muy apropiado para cutis seco y los labios agrietados.
Aceite de coco:
El aceite que se extrae de este fruto tropical está lleno de omegas que fortalecen e hidratan la piel del rostro. Además es el desmaquillante puro por excelencia y elimina el maquillaje de forma natural y, gracias a sus propiedades antibacterianas y antifúngicas, sirve como limpiador facial para las pieles más sensibles y enrojecidas.
Sus propiedades antibacterianas también lo hacen ideal para pieles con tendencia acnéica, ya que combaten los microbios y bacterias que causan el acné, además de reducir el tamaño de los poros. Puede aplicarse por las noches, tanto en el cutis como en el contorno de ojos, para prevenir las arrugas y líneas de expresión; en las pestañas, para fortalecerlas y darles cuerpo; o como bálsamo labial. Además, para los hombres tiene otro uso más: puede sustituirse por la crema de afeitado: protegerá la piel y la dejará suave y sedosa.
Aceite de caléndula:
El aceite de caléndula tiene propiedades antinflamatorias y suavizantes y suele mezclarse con otros aceites base, como el de almendras, para su uso. Es muy apropiado para eczemas e irritaciones como la que ocasionan los pañales en los bebés, ya que ayuda a desinflamar los tejidos.
Asimismo también puede aplicarse en verrugas (favoreciendo su desaparición), en pieles acnéicas (ayuda a evitar los brotes), sobre quemaduras ocasionadas por el sol y picaduras de insectos.
Aceite de cáñamo:
Este aceite se extrae en frío a partir de las semillas del cáñamo y debe ser guardado en lugares secos, frescos y sin luz, ya que las altas temperaturas destruyen sus propiedades. La presencia de Omega-3 y Omega-6 combate el acné y reduce los poros, mejora la psoriasis y el eczema.
Aceite de jojoba:
Este líquido se extrae de las semillas de la planta de jojoba, un arbusto que crece en los desiertos de Arizona, California y Nuevo México. Los indios americanos ya usaban esté aceite para el cabello y para proteger la piel del sol, y es que sus propiedades antioxidantes protegen la piel de los radicales libres. Este aceite, además, mejora los desequilibrios del sebo por lo que está especialmente indicado para tratar el acné. Asimismo, sus propiedades hidratantes la hacen muy aconsejable para las pieles y cutis secos, mejorando la regeneración celular, aumentando la elasticidad y la suavidad de la piel.
Aceite de onagra:
El aceite de onagra ha probado ser especialmente beneficiosos para tratar trastornos femeninos como los síntomas de la menopausia y el síndrome premenstrual. Además de sus beneficios internos, el aceite de onagra usado en la piel, mejora el aspecto del acné, previene el envejecimiento cutáneo e hidrata la piel. También es muy efectivo para la psoriasis, la sequedad y los eczemas, ya que ayuda a reducir el picor de la piel.
Aceite de rosa de mosqueta:
Este aceite se extrae de las semillas de un arbusto silvestre de la familia de las rosas (rosa moschata o rosa rubignosa), y está repleto de ácidos grasos esenciales como el omega-3, omega-6 y linoleico, además de antioxidantes y vitamina A y E. Su popularidad se debe sobre todo a sus propiedades regeneradoras, que favorecen la cicatrización de la piel, la apariencia de las estrías y las manchas de la piel. Este aceite también ayuda a combatir el envejecimiento y mejora la pigmentación, el tono y la textura de la piel, lo que lo convierte en un aliado idóneo para pieles maduras o con problemas de pigmentación. La vitamina A que contiene mejora la humedad del cutis y crea una barrera de impermeabilidad que impide la pérdida de agua, y lo hidrata.
Y Tú, ¿Utilizas alguno de estos aceites? Cuéntanos tu experiencia, recuerda que tu opinión es la más importante para nosotros.
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