El mundo de la moda es todo un tema con miles de vertientes, si piensas que comprar lo que está en tendencia es únicamente “Andar a la moda” estás muy equivocado, ya que la industria implica cuestiones de economía, comercio, publicidad, marketing, etc.
Las grandes marcas de ropa y accesorios se someten a un sin fin de pruebas que el mercado les va poniendo y es que es un hecho que lograr algo nuevo es muy complicado y los diseñadores lo saben. Innovar se convirtió en una tarea muy difícil, misma que para Gianni Versace era muy fácil de lograr.
Gianni Versace es el creador de la prestigiosa marca de ropa VERSACE la cual tiene sus inicios en Italia y que le bastó muy poco tiempo para consolidarse como una de las mejores, de las más caras y de las más aclamadas por todo el mundo, sobre todo para la comunidad LGTB… dado que se sentían sumamente identificados con el diseñador.
La famosa serie de la muerte de Versace, puso nuevamente a la marca en el ojo de varias personas, no es mentira que desde la muerte de Gianni la compañía decayó mucho, se rumorea que es por los malos tratos que hizo la hermana, tal parece que le quedó demasiado grande el compromiso que conlleva tener una empresa tan respetada.
Cuando la marca de ropa entra en la bolsa de valores, MICHAEL KORS llega para comprarla por completo, se hace de los derechos, los diseños y demás. Todos creían que VERSACE desaparecería y que MICHAEL KORS se adueñaría de la famosa medusa, todo fue al contrario, VERSACE sigue vivo y con mucha fuerza, los pensantes detrás de MICHAEL KORS decidieron que VERSACE sería su marca de gama alta o de lujo.
A pesar de que VERSACE sigue en el negocio, hay personas que afirman que la marca decayó en cuestión de calidad al punto de que puedes llegar a conseguir prendas de esta marca en tiendas encargadas de recabar lo que otras tiendas no quieren y es ahí donde se ve sucio el prestigio de lo que alguna vez fue VERSACE y de lo que Gianni representaba.
No importa si artistas como Bruno Mars usen la marca en sus videos musicales, eso no te salva del declive inminente que implica que otras cabezas piensen respecto a tu visión.