Por: Dra. Lulú Cuevas
Aquí nos encontramos de nuevo mis queridos lectoras y lectores. Cada vez son más las y los que se van sumando al interés por ésta excelente revista que les aporta la mejor información para su desarrollo personal y cultural.
Hoy les quiero compartir un tema que compete a todos, ya que de alguna manera todos tenemos o hemos tenido una, y me refiero a la Familia.
¿Qué características debe tener? ¿Cuántos tipos de familia existen?
Bien, pues comencemos. La familia es la célula social por excelencia, y la OMS (Organización Mundial de la Salud) la define como “el conjunto de personas que viven y conviven bajo un mismo techo, organizadas y con roles determinados, con vínculos consanguíneos o no, con un modo de existencia económico y social comunes y con sentimientos afectivos que los unen”
Pero con la evolución social y cultural como humanidad nos encontramos frente a una diversidad en los tipos de familia, anteriormente décadas atrás, solo se reconocía a la familia como la componente de Papá-Mamá-hijos.
Con esta evolución progresiva de la sociedad se ha dado lugar a una transición en el concepto tradicional de la familia.
Este desdoblaje en el concepto de familia nos ha hecho caminar cada vez más hacia la inclusividad y nos indica que la estructura familiar no es factor determinante para que la familia sea funcional o no, tomándose más en cuenta factores tales como la armonía, la comunicación, el respeto, la colaboración entre otros.
Y ya que la familia y sus funciones está relacionada a cubrir ciertas necesidades básicas como al desarrollo del sentido de pertenencia y a la identidad, la necesidad de tener y cuidar (en el sentido material, económico y educativo) la necesidad de relación, con el aprendizaje de la socialización y comunicación cimentadas en el sentimiento afectivo.
Actualmente existe una gran diversidad en los tipos de familia. Aquí algunas de las más destacadas.
Familia biparental con hijos
La familia biparental con hijos es la más clásica, también conocida como nuclear o tradicional. Está formada por padre, madre y el/los hijo/s biológico/s. Culturalmente aún podemos decir que es el tipo de familia más común.
Familia homoparental
Las familias homoparentales, formadas por una pareja homosexual (dos hombres o dos mujeres) que puede haber o no hijos. Aunque no es nuevo este tipo de familia, su presencia en la sociedad ha ido ganando espacio significativo en los últimos años y han tenido que luchar contra los prejuicios derivados de la homofobia, pero afortunadamente con el proceso que se va teniendo como sociedad, avanza también la aceptación de las familias homoparentales.
Familia reconstituida o compuesta
Esta clase de familia probablemente es la más frecuente en la actualidad debido a la creciente tendencia al divorcio, son las que están formadas tras una separación, los hijos viven entorno a la nueva pareja que haya formado su padre o su madre y que eventualmente puede ser que esa nueva pareja también tenga hijos a su cargo y aún más, en el transcurso de vida de esta pareja pueden procrear hijos en común.
Familia monoparental o uniparental
Este tipo de familia están formadas por un único adulto que se hace cargo del (o los) hijo(s) generalmente, son más en las que el adulto presente es la madre.
Familia adoptiva
Este tipo de familia consta de una pareja (o un adulto en solitario) con uno o más hijos adoptados. Pese a no tener vínculos de sangre, son igualmente familias que pueden desempeñar un rol parental igual de válido que las familias biológicas.
Familia extensa
Formada por varios miembros de la misma familia que conviven bajo el mismo techo. De este modo, pueden convivir padres, hijos y abuelos, tíos, etcétera. También cuando aquellos hijos que forman su propia familia se quedan a vivir bajo el mismo techo.
Es evidente que las familias han cambiado, aunque quizá la aceptación social no las ha acompañado al mismo ritmo debido a la cultura y creencias.
Normalizar las nuevas formas de ser familia es fundamental tanto para los adultos como para los niños, ya que la evolución como sociedad y humanidad avanza inevitablemente.
Y bien, dentro de toda esta tipología existen también características muy particulares en la forma de relacionarse al interior de ellas, que no siempre garantiza un ambiente lo más propicio para su desarrollo tanto como eje dinámico, así como para sus integrantes.
Encontramos pues características que influyen de manera determinante para el individuo en su esfera psicológica
La familia de tres generaciones es aquella donde los abuelos aportan ayuda económica, cooperando y distribuyendo tareas familiares con la finalidad de seguir ejerciendo un control.
Los hijos no tienen claro quién tiene la autoridad debido a los constantes choques que surgen de la crítica e intrusión de estos primeros en contra de la forma como los hijos (padres de los nietos) ejercen la autoridad y la educación, derribando así los límites y fronteras establecidos, y ya sin reglas ni normas a seguir (por lo confusas e inconstantes) el hijo (y a la vez nieto) se vuelve manipulador y controlador porque aprende que los roles de poder se pueden manipular y él también quiere hacerlo, lo que lo lleva a alienarse con quien más le convenga según la circunstancia.
Otra familia característica es la familia soporte. Común en nuestra sociedad mexicana, es aquella donde se parentaliza al hijo(a) mayor, delegándole responsabilidades y acciones e incluso la autoridad de uno o los dos padres, dándole al hijo parentalizado un poder que lo lleva a vivir conflictos de lealtades por la postura donde se le coloca, se llega a sentir excluido de sus iguales fraternales (hermanos) pero no siente estar en igualdad con sus parentales (padres).
El hijo necesita tener el cuidado, cariño y protección de sus padres, sentir su apoyo en momentos de duda e incertidumbre, pero todas estas necesidades se bloquean con el rol que se ve forzado a cumplir. Todo ello desarrolla la posibilidad de que se genere alguna psicopatía que se detone en la adolescencia.
La familia acordeón es una familia común sobre todo en las comunidades rurales de nuestro país debido a la migración hacia otros países (Estados Unidos más comúnmente), uno de los padres se separa de la familia por largos períodos de tiempo, por lo regular es la madre quien queda al cuidado de la crianza de los hijos y aunque no se le considera proveedora como tal, es quien distribuye y cuida de los recursos para el hogar, quedándose con la responsabilidad del que se fue.
Esto genera en los hijos un desapego hacia el padre (o madre) que se fue, llegando a desarrollar un sentimiento de abandono y consecuentemente generando un sentimiento de enojo con quien se quedó, primero por haberlo permitido y en segundo por no promover la oportunidad de desarrollo y crecimiento ambiental que seguramente está disfrutando el que se fue.
La familia muégano es una descripción muy mexicana que se da a las familias que deciden hacer todas las cosas sin separarse, no promueven la individuación ni la diferenciación, siguiendo patrones muy rígidos y mostrando para los externos, un hermetismo hacia los asuntos internos de la familia.
La comunicación la llevan a cabo de manera que las expresiones sobre las diferencias entre sí, quedan totalmente anuladas.
No existe un rol determinado para cada integrante de la familia, en esta forma de dinámica todos se enteran de la vida de todos, no existe la privacidad ni la independencia, por lo que la toma de decisiones individuales se vuelve muy difícil. Son familias detonadoras de trastornos de la conducta alimentaria, que pueden aparecer en uno o varios miembros de la familia.
Pues bien, espero que con esta información podamos darnos cuenta de que la salud mental surge al interior de la familia y que lo mejor es la apertura hacia la diversidad, aportando como miembros activos en ella, la mejor parte de mostros mismos para una sana convivencia y una buena relación familiar.
Ojalá y hayan disfrutado de este artículo. Nos leeremos en la próxima edición. ¡Saludos!
Síguenos en Redes Sociales INSTAGRAM FACEBOOK YOUTUBE TWITTER
