Por: Dra. Lulú Cuevas Psicóloga Clínica, Psicoterapeuta Familiar y de Pareja, Hipnoterapeuta Ericksoniana
Una nueva realidad ha venido a asaltar la forma tradicional de la vida en familia; la aparición del ya tan mencionado Covid-19, ha marcado en la interacción familiar de la pareja, los hijos y los miembros de familia de origen, un antes y un después es como si la historia de la humanidad si hubiese fracturado en dos momentos, el covid ha impactado de muchas formas, (incrementó la tasa de suicidio) es necesario manejar la situación asertivamente.
Las circunstancias actuales que trajo el virus, nos ha dejado a través de 150 días el aprendizaje de muchas cosas, entre las cuales destaca la importancia del valor de la familia y el apreciar a los que están a nuestro lado, hacer un alto en nuestro acelerado ritmo de vida, dado que habíamos olvidado que lo más importante no es lo tangible, entender que no es lo que se recibe sino lo que se da, porque ya no seremos las mismas familias a partir de esta experiencia.
El confinamiento ha generado un impacto psicológico en las personas, sin embargo, la convivencia familiar sana y adecuada, debe ser la herramienta para evitar que se genere estrés al interior de los hogares; por lo tanto, es conveniente crear estrategias y formas de cómo desde casa enfrentar esta amenaza.
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Temor es el sentimiento que ha venido predominando en estos últimos meses, el miedo a contagiarnos de un pequeño virus que se ha convertido en un gigante invisible, destruye muchas cosas a su paso, como la demostración afectuosa del cariño y el amor, y esto sólo se puede preservar al interior de la familia como cualidad natural del ser humano. Aplicar esto a la vida familiar e interpretar que como la luz que pasa de foco a foco, así también la vida nos devuelve lo que hemos dado, todo se reduce al efecto del acto-consecuencia.
El incorporar a nuestra nueva normalidad rutina creativas de convivencia para el mejor desempeño de la dinámica familiar preestablecida en el antes, encontrar el reforzamiento de las interacciones positivas, rescatar costumbres que estaban olvidadas por prisas y rutinas, analizar sí en este tiempo de confinamiento se agudizan los conflictos o aparecen nuevos, es un análisis que amerita tiempo pues hemos estado viviendo este proceso y las consecuencias se observarán a mediano y largo plazo.
Para sobrellevar la pandemia en familia es importante que tengamos conscientes de la realidad que estamos viviendo y que implica un desafío, un reto que con lo aprendido en el ANTES nos permitirá sobrevivir en el DESPUÉS, la forma como tomemos esta oportunidad, nos dará el crecimiento familiar que necesitamos, y si queremos que nuestra familia aprenda de esta situación es importante tener en cuenta el prepararnos para el día a día, el no salir no debe implicar que no estemos en familia, o que no destaquemos las cualidades de los que están a nuestro alrededor, sino por el contrario, fortalecer nuestros vínculos a través del reconocimiento nos hará más llevadera esta contingencia, sólo así podremos haber aprendido que la familia es el cimiento que genera la fortaleza para enfrentar la adversidad.
Algunos consejos para practicar al interior de nuestra familia son:
Hablar sobre nuestros temores como adultos y asimismo hablar sobre los temores de los niños, responder las preguntas sobre la pandemia de manera simple y honesta.
Validar los sentimientos del otro
Mantenerse en contacto con seres queridos, ya sea por mensajes de texto, por redes sociales, video llamada, u otros.
Dando el ejemplo de cómo manejar las emociones, tomando calma, analizando y organizando nuestras ideas.
Tener expectativas futuristas
Decir más “Te quiero” con más frecuencia.
Mantener rutinas saludables
Practicando la disciplina positiva, ya que algunos niños podrán presentar malas conductas por aburrimiento, aquí debemos encontrar juegos creativos, empleando recompensas y usando pausas obligadas.
Cuida de ti misma para cuidar de los demás
Evita castigos sobre todos los físicos
Y siempre recuerda hacer un alto, respirar hondo y confiar en ti.
Salud Emocional
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